La semana del 14 al 18 de marzo celebramos la semana vocacional en Griñón. Para una de las actividades preparadas para la ESO tuvimos la suerte de contar con la colaboración de Sonia Olea Ferreras, antigua alumna de nuestro centro, que actualmente trabaja como abogada para Cáritas España y Comisionada de Caritas Internationalis ante Naciones Unidas para Derecho Humano Vivienda. Con su amplia experiencia y formación, hizo reflexionar a nuestros alumnos acerca de las diferentes injusticias que se dan en nuestra sociedad y en el mundo global en el que vivimos. No solo compartió su testimonio de trabajo sino también de vida, dado que vivió con su familia una experiencia misionera de más de veinte años en Chile. Ella misma contó a los chicos que su interés en los temas de voluntariado se inició por el testimonio que ella recibió de otras personas cuando estaba en el colegio. A veces se nos olvida el poder de transformación y cambio que podemos generar en nuestros colegios a través de estas actividades y semanas especiales. Sonia es un ejemplo de todos esos lasalianos que, en su momento fueron sensibles a la llamada evangélica a trabajar por construir un mundo más justo e igualitario. Este mensaje ha coincidido con la iniciativa solidaria para colaborar con la Diócesis de Getafe, a través de nuestro capellán Óscar, aportando ropa de abrigo, alimentos no perecederos y medicamentos para refugiados de la guerra de Ucrania.
Esta misma semana ha sido una alegría contar con otros antiguos alumnos que han aportado su experiencia académica y/o profesional a los alumnos de 4º ESO y 2º de Bachillerato que se enfrentan a un periodo importante de toma de decisiones. Es inevitable sentir un gran orgullo por los logros que van adquiriendo y, a la vez, una gran dosis de energía para los docentes escuchar cómo hablan con tanto cariño de su paso por el colegio y cómo destacan que lo que más les aportó fue la cercanía y acompañamiento de sus profesores.
Además también pudimos contar con la colaboración de algunas familias del centro que ofrecieron su testimonio en la etapa de Primaria sobre su vocación cristiana y la importancia de vivir los valores cristianos en el entorno familiar.
En definitiva, una semana que nos hacer sentir aún más, una auténtica familia lasaliana, transmisora de valores y que nos anima a seguir trabajando con ilusión y dedicación por la Misión, a pesar de las dificultades que nos encontramos en el día a día.