¡Siempre es tiempo para el agradecimiento! Cuando parecía que ya habíamos puesto «punto y final» al curso 2023-24 con su singular lema de «GRACIAS», dos acontecimientos que compartían fecha y lugar han brindado la oportunidad a los Hermanos y lasalianos a no dejar atrás esta actitud.
El habitual encuentro de las zonas comunitarias de Madrid y Canarias tuvo lugar el pasado sábado en la casa de los Hermanos de Griñón. Los animadores de zona, Hnos. Octavio y Pedro Luis, se encargaron de recoger las experiencias más significativas del pasado curso y ofrecer la palabra a quienes han dispuesto de un protagonismo singular en este periodo final. Entre estas personas, todos los miembros del Equipo de Animación Distrital que finalizaban sus funciones en el cargo de animación fueron agasajados con un portavelas elaborado artesanalmente, símbolo de la importancia que tiene que ahora -cada uno- lleve su luz a los nuevos destinos y misiones.
También, los Hermanos Juan González y Pepe Tomás dieron las gracias por los últimos siete años compartidos con los Hermanos y lasalianos de estas zonas comunitarias e instaron a perseverar en la dinámica de la conversión personal y comunitaria para afrontar los «caminos de transformación» a los que invita el Instituto.
El último de los Hermanos que se despidió de sus funciones con unas amplias palabras de agradecimiento, como así ha hecho constar en su Carta al Distrito, fue el Hermano José Román Pérez. Tras sus siete años al servicio del Distrito Arlep como Visitador, pasa el relevo al Hermano Esteban de Vega e invita a todos los Hermanos y lasalianos a imaginar un nuevo horizonte comunitario caracterizado por la experiencia de la fraternidad y la común-unión.
Junto a esta habitual efeméride, se unió el singular acontecimiento de la primera profesión religiosa de los Hermanos Borja y Cristian. Estos, tras el periodo de formación en la casa del Noviciado, emitían sus votos ante la Comunidad lasaliana y ante el Hermano Joel Palud, en representación del Hermano Superior General. Ambos Hermanos han estado vinculados a la misión educativa y evangelizadora del Sector Madrid durante los últimos cursos y, ahora, se incorporan a la Comunidad Betania para prolongar su periodo de formación inicial y llevar a cabo las labores que les son propias.
Este acto, cargado de emoción y alegría, fue un signo de vitalidad del Instituto, el cual reconoce que «es de grandísima necesidad para este tiempo». Los Hermanos Borja y Cristian con la emisión de sus votos temporales por un año, han pedido a todos los Hermanos y lasalianos una oración por ellos y por la configuración fraterna de la Comunidad lasaliana en el mundo.
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