Hemos vivido el quinto y último día de la IV AMEL en Llíria como un regalo de fraternidad y esperanza. Volvemos a Galilea para dar vida a lo que hemos escrito en los papeles, nos decíamos en la crónica anterior.

La afirmación La Salle mira más allá expresa con claridad nuestra capacidad para soñar con fidelidad creativa y visualizar los seis horizontes que se han concretado en la Asamblea y a partir de los cuales se votaron 19 objetivos, 62 líneas de acción y 4 propuestas.

Después de la lectura del Evangelio de hoy que nos animaba a “levantarnos, coger la camilla e irnos a casa” para continuar saliendo de nuestra zona de confort, hemos procedido a la aprobación de las actas de las sesiones plenarias del jueves 11 y a continuación la tercera y definitiva votación para elegir a los tres lasalianos del nuevo Consejo MEL del Distrito que, junto con los miembros de derecho, formarán parte de este.

Continuamos con la evaluación de la IV AMEL, que se ha planteado en dos enfoques, uno compartido en sesión plenaria y otro a través de un formulario online. Hemos valorado tanto los aspectos organizativos como el tratamiento de las temáticas, los momentos de exposición y debate, de oración y celebración, las dinámicas preparadas con esmero por los diversos equipos y la comisión preparatoria, la excelente tarea del equipo de secretaría, el personal de la casa de Llíria… Destacan los comentarios de los asambleístas para continuar abriéndonos a conocernos más, a seguir construyendo juntos y a creer en nosotros mismos -nos animaba el Hermano Vinicio González, Delegado de Educación de la RELAL-, el ambiente de confianza, la felicitación y agradecimiento por el trabajo realizado, los desafíos planteados… Sabemos que no podemos perder de vista el horizonte de las periferias, el sufrimiento de los inocentes y a quienes han estado siempre presentes en nuestro corazón: San Juan Bautista de La Salle y Jesús de Nazaret.

Después de firmar el acta de clausura de la Asamblea, hemos disfrutado de la primicia de un vídeo que ha preparado el equipo de Comunicación reflejando el transcurrir de la Asamblea en estos cinco días. Las palabras de agradecimiento del Hermano Joël Palud, Consejero General del Instituto, apreciando el talento de la organización de la Asamblea y su estilo distendido, han resaltado el valor del Documento Marco de Evangelización y la necesidad de no perder de vista, por parte del Distrito, la dimensión internacional del Instituto, en especial focalizándonos en el problema de la inmigración en la RELEM. El Hermano Joël ha destacado la importancia de ampliar horizontes en la Identidad Lasaliana como fuente de enriquecimiento.

 

El Hermano José Román Pérez Conde, Visitador Titular del Distrito, nos ha invitado a agradecer con aplausos el esfuerzo de Silvia Pompa, responsable de Comunicación distrital, Juan Agus Sánchez, referente de Comunicación del Sector Valencia-Palma, Sebastián Núñez, el director de la casa de Llíria y a todo su equipo, la Comisión Preparatoria y el equipo de Secretaría.

Necesitamos de vosotros en la Misión Lasaliana”, nos decía el Hermano Visitador, invitándonos a sentirnos protagonistas en dar respuestas, a renovar la cultura vocacional, el cuidado de las personas, a continuar reforzando la fraternidad de la identidad que nos define, la visión comunitaria, a asumir con humildad y sinceridad la propia historia,  a no olvidar la protección del menor y a abrirnos a las nuevas realidades de la familia lasaliana. “Buscar la creatividad que pasa por el corazón, vivir de frente al todo, sin quejarnos, siguiendo comprometidos en la Misión”.

En la celebración de la Eucaristía hemos encomendado a Dios el trabajo realizado, sabiendo que Somos un solo cuerpo y un solo espíritu y que…

SOLO JUNTOS ALCANZAREMOS NUESTRO HORIZONTE: HACER REALIDAD EL SUEÑO DE SAN JUAN BAUTISTA DE LA SALLE

La IV AMEL ya escribe su esencia en la historia reciente de nuestro Distrito Arlep, pero no es un simple eco de palabras. Ahora se abre un tiempo para centrarnos en el Plan Estratégico del Distrito que trazará el camino de nuestra Misión en los próximos cuatro cursos desde la Fe, la Fraternidad-Sinodalidad y el Servicio. Caminemos para que no existan periferias; somos semilla de vitalidad; dejemos que el Espíritu siga soplando entre nosotros; ¿cómo disfrutar de lo que hemos vivido?… expresaban algunos asambleístas.

Después de una exquisita comida (como lo han sido todas) ha venido una despedida cargada de emoción. Regresamos a nuestras Comunidades convencidos de que, como proclamaba el lema de la Asamblea, Juntos somos horizonte.

Nos damos las GRACIAS por haber hecho posible esta IV AMEL celebrando que

¡VIVA JESÚS EN NUESTROS CORAZONES, POR SIEMPRE!